Título: Las ventajas de ser un marginado
Autor: Stephen Chbosky
Número de páginas: 250
Año de publicación: 2012
Editorial: Alfaguara
ISBN: 9788420403540
Charlie es un chico realmente especial: lee muchísimo, no sale con sus amigos ni con chicas y reflexiona sobre el mundo que le rodea dede un punto de vista muy particular. Su ingenuidad, su incapacidad para relacionarse normalmente y su extrema sinceridad le crean más de un problema, especialmente ahora que su único amigo ha muerto. Conocer a Sam y a Patrick, los chicos más populares y vitales del instituto, provocará un giro radical en su vida que lo sumergirá en el mundo de la adolescencia.
Charlie es un chico fuera de lo común. Es muy solitario, ingenuo y sincero. Este año empieza el instituto y nunca se le ha dado bien hacer amistades. Vive con sus padres, su hermano el jugador de fútbol que esta a punto de empezar la universidad, y su popular hermana mayor. Su primer año pinta fatal cuando el único amigo que consigue hacer el pobre Charlie, sea un extraño y amable profesor de lengua muy interesado por esa capacidad que tiene Charlie de ver el mundo de otra manera y durante todo el libro trata de despertar su genio creativo. Un día Charlie conoce a la bella Sam y al excéntrico Patrick, dos de los chicos más populares de la escuela, con muchas ganas de vivir la vida y disfrutarla al máximo. Su amistad tiene como consecuencia la integración de Charlie en el complicado mundo adolescente, empezará a beber, a fumar, saldrá de fiesta, descubrirá música nueva e incluso se enamorará por primera vez.
Empecé este libro con las
expectativas muy altas, después de leer las buenísimas críticas que tenía. Me llamaba
mucho el tema del libro, ya que me parecía
diferente, algo que
nunca había leído antes, y de vez en cuando me gusta inovar. Es un libro raro, pero no raro en el sentido malo, raro en el sentido de algo nuevo. Debido al
protagonista o a la trama o la manera de narrar, o todo en conjunto. Es peculiar.
El libro esta contado en
cartas que Charlie le manda a alguien anónimo, no llegamos a saber quien es a lo largo del libro, contando lo que pasa. Me pareció una idea
muy original y me llama mucho la atención.
"Las cosas cambian, los amigos se van y la vida no se detiene para nadie."
La verdad es que al principio cuesta cogerle el truquillo porque tiene un lenguaje muy coloquial junto con la historia narrada en cartas es algo sorprendente y al principio
cuesta adaptarse pero después de los capítulos iniciales superada la sorpresa, me acostumbré. A partir de ahí me enganché al libro, y me lo terminé en un par de días. Los
sentimientos te acompañan durante todo el libro. Muchas veces tienes ganas de llorar, otras de reír.
Sufrí y reí mucho con este libro. Me gusta mucho porque tiene mucho sentimiento, la
manera de contar lo que ocurre o lo que piensa es muy
detallada y especial, tanto que te
metes de lleno en la piel del protagonista y sufres lo mismo que él. Otro punto que me encantó del libro, fueron los
toques humorísticos que tiene, son muy buenos y me parecen un punto importante para el libro, ya que hay varias escenas tristes, muy tristes en este libro y si no existieran esas pequeñas pinceladas de humor, probablemente sería un libro
demasiado triste para mi gusto.
Patrick empezó a conducir realmente rápido . y justo antes de que llegáramos la túnel, Sam se levantó, y el viento convirtió su vestido en un océano de olas. Cuando entramos al túnel . todo el sonido desapareció con el vacío y los sustituyó una canción en el radiocasete. Una canción preciosa llamada Landslide. Cuando salimos del túnel, Sam soltó un grito de pura diversión y allí estaba: el centro de la ciudad. Luces sobre los edificios y todo lo que hace que te asombres. Sam se sentó y empezó a reír. Patrick empezó a reír. Yo empecé a reír. Y, en ese momento, juro que éramos infinitos.
Este libro me hizo pensar, es muy
reflexivo, te deja unas frases que se te graban a fuego en la mente y no puedes olvidarlas, me ha marcado mucho, y es que sus escenas, sus frases son tan profundas que te llegan al corazón y realmente te hacen pensar. Por lo menos, yo nunca las olvidaré y es que desde que leí este libro he comenzado a ver el mundo de otra manera.
"Aceptamos el amor que creemos merecer."
Charlie es un chico
muy especial, no se encuentra uno así facilmente. Es
ingenuo, cariñoso y sincero. Siempre va con la
verdad por delante, cosa realmente admirable pero que también le causará más de un problema. Es
dulce y lee mucho. Quiere ser escritor. Ve el mundo desde un punto de vista muy
peculiar para un chico de su edad. Le cogí
mucho cariño en seguida, y empatizé con él a lo largo del libro.
-Te odio.
Lo dijo de forma muy distinta a como se lo había dicho a mi padre. A mi me lo decía en serio. Muy en serio.
-Te quiero- fue lo único que pude decir como respuesta.
-Eres un bicho raro ¿lo sabes? Siempre has sido un bicho raro. Todo el mundo lo dice y lo ha dicho siempre.
-Estoy intentando no serlo.
Sam es un
cielo, es buena amiga, amable y cariñosa. Me ha caído muy bien. Me parece una chica llena de vida y muy positiva. Patrick es muy gracioso, algo loco y también está lleno de vida. Me he reído mucho con él. Ambos son grandes personas que sabrán aceptar a Charlie tal y como es.
También los personajes secundarios juegan un papel importante en este libro.
El final me dejó realmente impactada, no me lo esperaba. Fue demasiado
rápido, de sopetón y lo cierto es que tuve que
releerlo para
entenderlo bien y no dejarme ningún detalle al margen.
En conjunto fue un libro que me ha gustado mucho. Tiene de todo:humor, tristeza, amor, desamor. Un gran libro con unos personajes que sin duda te llegan al corazón, al igual que sus frases y su bonita manera de ver la vida. Un libro precioso.
Me encantan los personajes que han escogido para la película, que aún no he tenido la oportunidad de ver, pero que probablemente pronto lo haré. Me parecen perfectos. *-*